Google podría tener que cambiar (a la fuerza) su todopoderoso buscador en Europa
La rivalidad entre Google y los sitios independientes de comparación de precios está aumentando y podría llevar a la subsidiaria de Alphabet a modificar la página de resultados en su famoso y poderoso motor de búsqueda.
Cuando alguien busca comprar algo en línea, generalmente recurre primero a Google, que presenta al usuario una serie de ofertas con fotos y precios destacados en la parte superior de su motor de búsqueda.
A pesar de la presencia de muchos otros sitios de comparación de precios en la web, estos se encuentran en clara desventaja en comparación con Google. Pocos internautas se molestan en hacer «scroll» para explorar ofertas en otros sitios de comparación de precios que tienen un posicionamiento menos privilegiado en el buscador de Google.
Los portales independientes de comparación de precios denuncian que las páginas de resultados de Google están diseñadas para favorecer claramente sus propios servicios en detrimento de los de sus competidores más pequeños. Las autoridades de competencia de la Comisión Europea respaldan estas acusaciones y, hace cinco años, impusieron una multa de 2.400 millones de euros a Google por favorecer su propio servicio de comparación de precios. A pesar de los cambios implementados por la subsidiaria de Alphabet, los competidores consideran que son insuficientes y han estado instando a la Comisión Europea a tomar medidas contra Google durante varios años.
La situación podría cambiar con la Ley de Mercados Digitales (DMA), que entra en vigor en noviembre en la Unión Europea. 43 portales de comparación de precios de 20 países europeos han enviado una carta a Margrethe Vestager, vicepresidenta de la Comisión Europea, y a Thierry Breton, comisario de Mercado Interior de la UE, solicitando la aplicación de la DMA. Esta norma otorga a plataformas como Google el papel de «guardianes de acceso» y tiene como objetivo imponer reglas de conducta especiales para combatir prácticas monopolísticas.
En la carta, los portales piden específicamente la aplicación de la DMA para prohibir que Google promocione su propio servicio de comparación de precios en la parte superior de su buscador, evitando así la competencia desleal. Aunque la DMA concede a los «guardianes de acceso» un período de adaptación hasta 2024, los competidores temen que muchos no sobrevivan a las prácticas monopolísticas de Google para entonces.